El ya exdirector general deportivo del Real Madrid salió a la palestra después de la comparecencia de Florentino Pérez y dejó claro que se va "triste" pero tranquilo por su lealtad al club
Valdano aparcó la corbata y se presentó con los dos primeros botones de la camisa desabrochados. ¿Un síntoma de liberación después de lo que ha vivido? No quiso definirlo así, pero tiene claro lo que ha sucedido para que ya esté fuera del Real Madrid y que el culpable de todo es Mourinho. "Si la percepción es que había una lucha entre los dos, lo que ha dicho Florentino Pérez deja claro el vencedor de la lucha".
El argentino reiteró que no quería abandonar el club: "Yo no tenía pensado dimitir. Pero ahora estamos en un escenario nuevo. El Real Madrid toma la decisión de crear una nueva organización y prescindir de la dirección general deportiva". Todo, como explicó Florentino Pérez, por dar más autonomía al entrenador tras una temporada en la que el presidente vio "disfunciones" entre técnico y director general deportivo. Valdano dijo que él no buscó esa bronca. "Yo nunca he convertido el Madrid en un campo de batalla. Todo mi esfuerzo es de contención. Fue un esfuerzo que se veía claramente cuando ejercía de portavoz en el que estaba obligado a la prudencia. En los medios de comunicación se planteó como una batalla pero yo traté de escapar, ya que eso no era bueno para el Real Madrid. Todo mi esfuerzo ha estado encaminado a fomentar la grandeza del Madrid", señaló.
"No sé cuál fue la intención de Mourinho. Lo que sí sé es que he hecho un esfuerzo a lo largo de la temporada para reducir el ruido que había alrededor del Madrid. Le pedí al presidente una reunión a tres para solventar cualquier diferencia, pero no ha sido posible", indicó Valdano, dejando claro que no encontró respuesta para solucionar esa tirantez: "Hace mucho tiempo que no hablo con Mourinho personalmente. Nos saludamos de una manera educada pero hay otros interlocutores en el club. En su momento le pedí hablar para solventar las diferencias, pero eso sólo sirvió para que se redujeran mis competencias con el primer equipo".
¿Tiene motivos Valdano para sentirse traicionado? Su respuesta fue elocuente: "Yo sólo mido la graduación de mi propia lealtad. Yo he sido muy leal a todos los estamentos del club y a la persona que me trajo. Yo me voy tranquilo porque mi lealtad ha sido total". Y añadió que el presidente no puede reprocharle nada: "He respetado a este club hasta las últimas consecuencias".
Apelando a su diplomacia habitual, Valdano capeó la pregunta sobre qué le diría a Mou si lo tuviera delante en ese mismo momento. "Delante de todos ustedes -refiriéndose a los periodistas-, a Mourinho le daría la mano. No me permitiría en este lugar, en una ventana al mundo, una salida de tono". Pese a lo acontecido, el argentino considera que la continuidad del técnico portugués es "buena para la salud de un club que ha sido tan inestable en los últimos años. Este club tiene que asentarse en un proyecto razonable".
"Me voy con la tristeza de dejar un club en el que llevo entrando y saliendo unos 27 años. Hay en el club personas de gran calidad humana y me apena alejarme de ellos", concluyó Jorge Valdano tras 27 años en el club, "entrando y saliendo, como él mismo dijo.
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